“¿Será cielo este lugar donde ahora estamos? Este Misterio que es lugar de encuentro donde las vidas se confunden en una sola vida, donde los que se van regresan para abandonarnos cuando hemos despertado.” Así se expresa el personaje Yo al final de Sueños en Misterio, obra autobiográfica en siete actos, correspondientes a siete sueños. El artificio de la ilusión poética crea un espacio onírico donde ficción y testimonio invitan a reflexionar sobre lo que hemos vivido y lo que somos.
“Son múltiples las posibilidades de montaje escénico de este auténtico OLNI –Objeto Literario No Identificado–, como denomina el autor a producciones literarias que no se acotan a moldes preestablecidos. Redactado en métricas de notable musicalidad que refuerzan su poética, Sueños en Misterio se abre a territorios de exploración expresiva como la danza, el canto, la declamación, el teatro oral o leído, y a su imbricación con otros lenguajes artísticos, como el cine de ficción. (...) Recreando el lenguaje y los paisajes que lo acunaron y aquellos que hizo propios, evocando los ecos de Ovidio, Calderón de la Barca, Rilke o Miguel Hernández, el Ricart Guerrero predispone nuestros sentidos al gozo y al asombro.”
–Cecilia H. Casamajor, Buenos Aires, Argentina
PRIMER SUEÑO
(detalle)
Voz
El misterio es lugar de circunstancias
Allí vibra el recuerdo de las pieles
desnudas de almas encarnadas
Vibran las pieles sin lisonja ni artificio
En el misterio somos soplo que siempre
estará, cruce de caminos del silbido de
la leve brisa, cuerpos de tierra nutridos
de hálitos y sangre
En el fondo deambulan sombras. Queda alumbrado el personaje Alma 1. Se acerca al centro del escenario donde yace Yo iluminado
-Pausa-
Le enfrenta y dice:
Alma 1
Soy esa voz que en tu cuerpo
mezcla el calor con el frío
despertando en un instante
esos genios escondidos que
al estremecerse embriagan
con ese deseo que es el mío
Yo
(Se levanta y se acerca a Alma 1. Le acaricia el torso)
Eres la voz que primero
me entregó al gozar sin pero
que me llevó de la mano
donde las pieles se rozan
cosquilleándonos con brío
sin temor ni matadero
Eres la voz de una boca
que me engulló casi entero
Nelson Ricart-Guerrero (Santo Domingo, 1953), es Artista Plástico, Fotógrafo, Escritor, vive y trabaja en París, Santo Domingo y Pénestin (Bretaña). Es el autor de Boca de tiempo roto (Ed. Letra Gráfica, 2005), Sólo quedan las Palabras (Isla Negra editores, 2009), Soy el Leife, el Pájaro malo (Erizo Editorial, 2013) y de La luna o los ritos del amor, largo poema sobre el amor carnal cuya fuente es un mito arahuaco que inspiró las composiciones de Anthony Ocaña del cd/libro In trance – la luna o los ritos del amor y en la voz del actor Juan Olivares (Producciones Los Mafus, 2015). Como Artista Plástico fue galardonado con el Primer Premio de Pintura del Gran Salón Nacional de Artes Plásticas en la Galería de Bellas Artes de Burdeos (1998), y el 2do. Premio de Pintura del Concurso de Arte E. León Jimenes (1998). Sus pesquisas plásticas tienen una estrecha relación con la Poesía. Su universo artístico está ligado al de su compañero Christian Vauzelle con el que ha realizado proyectos multimedia y en particular El doble/el alma en busca de un cuerpo, exploración sensible y visual de la dualidad.