Narraciones apócrifas

Narraciones apócrifas cuenta unos argumentos conocidos entre veras y mentiras. Es una propuesta lúdica que vierte en odres nuevos unos textos que nos deben resultar familiares. Su autor, magistralmente, recicla el pasado literario más remoto, al agregar unos argumentos paralelos a los ya existentes; el pretexto que le brinda la oportunidad de añadir nuevas aristas, unos capítulos inéditos –porque él los inventa a voluntad– a los relatos heredados que le interesa traer a la atención del lector de hoy. Mediante estas mudas, tanto espaciales como temporales, Gerineldo o Ginés de Pasamonte dialogan con personajes de nuestro entorno caribeño como el Judío Errante, con personajes entresacados de la tradición cristiana o del Espiritismo, o desde la puesta al día de un romance viejo o cualesquiera de las aventuras del Quijote, ya cuatro veces centenario; sobre la base cervantina de que la autoría de estas falsas crónicas recae en un supuesto verdadero autor cuya identidad se pierde en la noche de los tiempos. Esta entrega luminosa, una nueva forma de contar unas historias de embuste, es la flor nueva de unas gestas menores que nos reconcilian con el canon literario, contadas desde las voces de apócrifos autores detrás de los que se enmascara la voz única de Pedro Antonio Valdez.

–Juan Antonio Rodríguez Pagán

Pedro Antonio Valdez nació en la ciudad de La Vega, República Dominicana, en 1968. En 1989 obtuvo el primer premio en el Concurso Dominicano de Cuentos de Casa de Teatro con “El mundo es algo chico, Librado”. Ha publicado varios libros, entre ellos: Papeles de Astarot en 1992, con el que obtuvo el Premio Nacional de Cuento; la novela Bachata del ángel caído en 1999, merecedora del Premio Nacional de Novela; y Carnaval de Sodoma en 2002, galardonada con su segundo Premio Nacional de Novela. En 1998 recibió el Premio Internacional Alberto Gutiérrez de la Solana, por su texto teatral Paradise. En 2001 publicó el poemario Naturaleza muerta, que fuera galardonado con el Premio de Literatura UCE y el libro de relatos cortos La rosa y el sudario, finalista en el Premio Nacional de Cuentos. Fue coantólogo de Los nuevos caníbales: antología de la más reciente cuentística del Caribe hispano en 2000, premiado por el PEN Club de Puerto Rico, y Los nuevos caníbales, Vol. 2: antología de la más reciente poesía del Caribe hispano en 2003.